No todo los alcoholes que lees en las etiquetas de los productos son malos para nuestro cabello.
Hay dos tipos de alcoholes:
1. Alcoholes «grasos» o de cadena larga (alcoholes permitidos en el Método Curly Girl) : a menudo se derivan de recursos naturales como el aceite de coco. Son emulsionantes. Ayudan a que el agua y el aceite se combinen en los productos, suavizan la cutícula y ayudan a desenredar y a humectar el cabello.
Esta es la lista de los alcoholes de cadena larga más utilizados:
Cetyl alcohol, Cetearyl alcohol, Strearyl alcohol, Lauryl alcohol, Myristyl alcohol, Behenyl alcohol, C30-50 Alcohols, Isocetyl alcohol, Isostearyl alcohol y Lanolin alcohol.
2. Alcoholes de cadena corta (alcoholes NO permitidos en el Método Curly Girl) : se usan como aditivos en champús, acondicionadores, aerosoles, espumas, geles y tintes para el cabello para asegurar una mejor distribución. Proporcionan un menor tiempo de secado del cabello porque se evaporan muy rápido. Sin embargo, ese mismo efecto puede secar el cabello (absorben la humedad), dejando la cutícula más seca y encrespada.
Esta es la lista de los alcoholes de cadena corta más utilizados:
Alcohol, Etanhol, SD alcohol, Ethyl alcohol, Propanol alcohol, Alcohol denat, Denatured alcohol, Isopropyl alcohol, Witch Hazel y Propyl alcohol.
Los alcoholes neutros, como por ejemplo, el alcohol bencílico (utilizado como conservante ecológico) no tienen ningún efecto sobre cómo se ve y se siente el cabello.
Así que ya sabes qué alcoholes puedes elegir o descartar en tu rutina de lavado si estás cuidando tu pelo con el Método Curly Girl.